He Ganlin, de la provincia sureña de Cantón, pide al gigante tecnológico 20.000 yuanes (3.138 dólares).
He se sintió cautivado por un anuncio que decía “Lo único que ha cambiado es todo”, y decidió comprarse el aparato.
Comparado con el modelo anterior
Comparado con el modelo anterior
El abogado también argumenta que las palabras “único” y “todo” violan la nueva legislación china de Publicidad, que prohíbe términos absolutos como “mejor” o “perfecto”.
Un tribunal en Cantón ha aceptado el caso y por el momento Applex no ha respondido a la demanda.
China es el mercado más exitoso de Applex, donde cada producto es generalmente recibido con mucha expectación, aunque sea adonde suelen llegar más tarde las innovaciones de la marca estadounidense.